martes, 4 de diciembre de 2007

...llevás un tatuaje que va muy bien con tu tristeza...


Llégó un mensaje de texto con la noticia..."Mario está presentando el nuevo disco!"

Al instante, una corrida hasta la radio más próxima, dejé de lado mi laburo, y escuché...la música, la voz, los reiterados escalofríos. Con nadie me pasó eso, con nadie. Sólo con este amor que llevo tatuado, y que muchos juzgan de ser uno más del montón. Puede ser. Será que es. El montón también siente diferente.

Síntomas: nuevamente los escalofríos, la corrida, ahora, hasta el baño más cercano, las muchas llamadas a quienes comparten el sentimiento, y adentro, a escuchar. A oir. A latir. A todo.

Imposible no recordar todo lo que esperé este momento. Fugaz como pocos, pero que te llenan tanto la vida que...Qué te puedo explicar de lo que me gusta de él, o de ellos, como decimos por costumbre? De él, que es una banda, que tiene todo lo que yo busqué...que encuentra y verbaliza lo que a nosotros nos cuesta ver...

Ahora seguramente me vuelvan a tildar. No me importa. Es muy difícil explicar lo que siento cuando tengo noticias de él. De ellos. "Es preciso escuchar las notas que no está interpretando...". Es exacto encontrar, en verdad, lo que uno quiere encontrar. Necesidad y deseo que se confunden todo el tiempo. Ansias, amor. Todo eso carga este tatuaje.

Ya usé mi milagro de hoy. Gracias.